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Nuestra Casona de Barranco es una pequeña joya no solo para Artesanos, sino también para todo el distrito, se preguntarán de donde viene, cuál es su historia, para entenderla tenemos que hacer un paso atrás; muchos de ustedes seguramente saben que la Operación Mato Grosso (O.M.G.) es una gran familia de voluntarios. Desde que nació este movimiento, los jóvenes son su motor y corazón; cientos de chicos en Italia dedican su tiempo libre para trabajar y reunir fondos con los que sostienen las misiones en Latinoamérica.

Casona de Barranco
La casona hoy

El grupo de Lima y el sueño de la cafetería

En los años 2000 algunos chicos de Lima se animaron a apoyar a la O.M.G. de la misma manera: querían ayudar al P.Hugo trabajando duro y regalando todas sus ganancias. Viendo su esfuerzo y deseo de ayudar, el Padre les propuso abrir una cafetería, ahí en su barrio, en Barranco. Así empezó la búsqueda de una casa. 

Las indicaciones del P. Hugo eran muy claras: debe estar cerca de la plaza, en una calle transitada, debe tener una reja, un patio adelante y uno atrás. Nuestro amigo Víctor se encargó de esta búsqueda. Tras varios intentos, un día, caminando por la Av. San Martín, la vio: una casona medio destruida, con la reja oxidada pero en pie, un patio invadido por las plantas y un pequeño terreno atrás con una higuera. Le tomó varias fotos para poder mostrársela al Padre. 

Pero el P.Hugo vio la primera fotografía y decidió que esa misma iba a ser nuestra casa.

Justo en esos días el P. Hugo recibió una donación para la O.M.G. Gracias a la Providencia y a la bondad de algunas personas, se había podido reunir el monto suficiente para comprar la casa ¡entusiasmo!

La restauración resultó ser demasiado complicada. Aunque la primera idea era hacer una cafetería, los jóvenes decidieron ayudar de otra manera y abrieron una camino diferente. Tras varios años y aventuras, nació un grupo de la O.M.G. en Lima. Hoy en día, muchos jóvenes se reúnen para vivir este deseo de caridad… pero esta es otra historia.

La crisis del 2008

Otro pequeño inciso, era el 2008 y la gran crisis económica afectó todo el mundo, también Italia, donde era comercializada una gran parte de los muebles de Artesanos Don Bosco, la preocupación del P. Hugo era alta porque era necesario impulsar alguna idea para hacer frente a este momento complicado, no podíamos venir menos al compromiso de dar trabajo a los chicos.

El sueño de la cafetería no se realizó, pero la casona de Barranco seguía ahí.
Así, con un edificio para restaurar y un sueño que descubrir, nos pusimos manos a la obra.

Casona de Barranco
La casona Hoy

Una casa/ona para Artesanos Don Bosco

Habiendo obtenido el permiso del Ministerio de Cultura, algunos arquitectos voluntarios de la O.M.G. comenzaron a ocuparse de la restauración, pidieron ayuda a la arquitecta Katia Ampuero y la restauradora Ana Elisa Berenguel a quien debemos un agradecimiento por su generosidad. De este trabajo conjunto se obtuvo una restauración muy cuidadosa. 

La exposición de Artesanos Don Bosco es una casona que data de 1925, se pueden apreciar algunas características típicas. Se trata de un inmueble con implante de tipo rancho. Durante varios años sufrió varias modificaciones, ya sea estructurales y naturalmente por el uso que se le daba. Durante un periodo funcionó como morada de la familia, luego como escuela de arte, de danzas, teatro… hasta que fue abandonada.

La estructura que podemos observar en la fotografía está reservada a la exposición y venta de muebles. En cambio, en la parte de atrás hay otro lote, probablemente se trataba de habitaciones empleadas para la zona de servicio, en el respeto del perímetro y consonancia con el estilo, se ha construido una vivienda a disposición de los voluntarios que custodian la exposición. Para unir ambos lotes se ha optado por utilizar una escalera metálica, en reemplazo de los frágiles puentes de cuerda que posiblemente pendían de una habitación a otra.

La casona pre restauro

La casona de Barranco en detalle

Desde la Avenida San Martín podemos apreciar una reja de estilo clásico, con cuatro columnas. El frontis del inmueble cuenta con un pórtico principal y columnas al estilo neocolonial. Resaltan también las ventanas, ya sea rectangulares o en forma de arco, y el ventanal más grande que cumple con la función de vitrina. Tanto en la primera como en la segunda planta podemos apreciar los balaústres, una decoración muy típica del distrito de Barranco.

Esta parte de la construcción se conserva íntegramente en adobe y quincha, técnicas que han sabido resistir el paso del tiempo. Para la restauración, se colocaron sistemas de ventilación en el patio con el objetivo de absorber la humedad. Naturalmente, se tuvo que colocar un sistema de iluminación nuevo; esto se realizó siempre en el respeto de la capacidad de desmenuzarse propia del adobe.

Se habilitó una rampa en la entrada principal y se eliminaron algunos arcos que no iban con el estilo de la casa. Mientras que la escalera interna fue completamente restaurada, ya que la madera resultaba muy dañada por el paso del tiempo y los ires y venires de muchas personas… 

Respecto a los pisos y mosaicos, que datan de inicios del siglo XX, se han conservado los originales; esto, gracias a un trabajo de extrema delicadeza y precisión. Se conserva también un enchape y la imagen de Santa Marta en el patio posterior, cerca de la higuera.

Pueden ver un video muy interesante al respecto aquí

Casona de Barranco

No es una tienda de muebles

Nos queda todavía mucho que contar sobre esta casa, pero deseamos dejarles con una sencilla reflexión. El P. Hugo, soñaba en grande y encontró esta hermosa casona tratando de acompañar los sueños de los jóvenes; no estaba buscando una tienda para muebles y lo que encontró es más que una simple tienda para los muebles de los Artesanos. Esta confianza en los jóvenes, a lo largo de toda su vida, lo ha llevado a concretar obras extraordinarias. Además, el restauro de la casona se logró porque arquitectos, voluntarios y amigos se pusieron a trabajar, con ideas que diferían unas de otras, pero con paciencia y sobre todo con colaboración. Porque nunca seremos suficientes si pretendemos hacer las cosas solos. 

Casona de Barranco

Así que corran, vengan a conocerla, la casona de Barranco es para ustedes. Se mantiene viva gracias a los que vienen a visitarla, gracias a los que la usan, la cuidan y la habitan. Es para ustedes porque quiere contarles una historia de confianza, de colaboración, de amistad y de ser familia. 

5 Respuestas

  1. Realmente facinante y alexionador, felicitaciones. Soy un admirador asiduo de sus muebles. Bellísimos. Aparte que atrás de ello hay toda una institución de formación y altruismo.

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